Cuba comenzó oficialmente la programación de conmemoración del centenario de Fidel Castro, con una serie de actos que se extenderán hasta diciembre de 2026. Las ceremonias iniciales se llevaron a cabo en Birán, lugar de nacimiento del líder revolucionario, y en el cementerio de Santa Ifigenia, en Santiago de Cuba, donde reposan sus restos. La apertura reunió a dirigentes históricos, jóvenes y delegaciones internacionales que expresaron solidaridad y respeto por el legado del Comandante.
El país se prepara para un amplio calendario de actividades que incluye talleres, eventos culturales y deportivos, así como movilizaciones populares en distintas provincias. Las iniciativas están organizadas por entidades estatales y juveniles, con un enfoque en transmitir los valores de la revolución y fomentar la participación de las nuevas generaciones. Esta programación busca conectar el pasado histórico con las aspiraciones contemporáneas de la sociedad cubana.
En Birán, el acto fue presidido por Raúl Castro, quien destacó la fidelidad y compromiso del Comandante con la patria. Junto a él, participaron el presidente Miguel Díaz-Canel, miembros del Buró Político, representantes de las fuerzas armadas y delegaciones juveniles de varias regiones. La ceremonia tuvo un carácter emotivo, resaltando la vida y trayectoria de Fidel desde su infancia hasta convertirse en un símbolo de resistencia.
Las celebraciones contaron con la participación de la compañía infantil La Colmenita, que presentó un espectáculo basado en la infancia de Fidel, su relación con la familia y las experiencias que moldearon su carácter. La actuación incluyó elementos musicales y teatrales que reflejaron los ideales de la revolución y la importancia de la educación cultural para los más jóvenes, generando un ambiente de entusiasmo y admiración.
En el cementerio de Santa Ifigenia, Díaz-Canel rindió homenaje no solo a Fidel, sino también a otras figuras históricas de la independencia cubana como José Martí y Carlos Manuel de Céspedes. Durante su intervención, enfatizó que mantener vivo el legado del líder implica enfrentar los desafíos actuales con optimismo, aprender de los errores y trabajar en favor del pueblo, destacando la relevancia de sus ideas en la Cuba contemporánea.
El programa cultural del centenario incluye talleres gratuitos para niños y adolescentes en diversas disciplinas, como artes plásticas, fotografía, ajedrez y lenguaje de señas. Además, se proyectarán documentales, se realizarán exposiciones fotográficas internacionales y habrá presentaciones artísticas periódicas. Estas actividades buscan fortalecer la identidad cultural, promover la creatividad y garantizar la participación activa de la juventud en el conocimiento del patrimonio revolucionario.
Parte de las acciones se desarrollará en barrios, hospitales, centros de trabajo y penitenciarías, acompañadas de transmisiones virtuales que permiten ampliar el alcance de las celebraciones. La iniciativa responde a un esfuerzo por democratizar la cultura y acercar las experiencias históricas a distintos sectores de la población, fomentando un sentido de pertenencia y continuidad con los ideales que marcaron la historia de Cuba.
La víspera del aniversario, la Unión de Jóvenes Comunistas y el Instituto Nacional de Deportes organizaron un campamento masivo en la Ciudad Deportiva de La Habana, con la participación de miles de personas. Este evento simbolizó la unión de la juventud con el legado histórico del país, consolidando un espíritu de entusiasmo, compromiso y aprendizaje colectivo que caracterizará las celebraciones a lo largo del año y que proyecta los ideales de la revolución hacia futuras generaciones.
Autor: Jerome Rutland
