Chile continúa profundizando sus relaciones comerciales con China, su mayor socio comercial, mientras crecen las preocupaciones por una dependencia económica excesiva del país asiático.
Según datos recientes, más del 40% de las exportaciones chilenas tienen como destino China, siendo el cobre el producto más relevante, seguido de frutas, vino y productos del sector pesquero. Este fortalecimiento de los lazos bilaterales ha generado tanto oportunidades económicas como inquietudes estratégicas.
Recientemente, el presidente Gabriel Boric realizó una visita oficial a China, donde participó en el Tercer Foro de la Franja y la Ruta en Pekín. Allí, Boric destacó la importancia del vínculo con China, pero también hizo énfasis en la necesidad de diversificar el comercio exterior chileno. El mandatario subrayó que el país debe avanzar en la exportación de bienes con mayor valor agregado.
En el ámbito de las inversiones, el gigante asiático ya tiene participación en áreas clave de la economía chilena, como la energía, la minería y las infraestructuras. Empresas chinas han adquirido operaciones estratégicas, como la red eléctrica de la capital Santiago.
Esta creciente presencia ha provocado debates dentro de Chile sobre los posibles riesgos de depender en exceso de una sola economía. Analistas locales advierten que un cambio abrupto en la demanda china o nuevas tensiones geopolíticas podrían afectar seriamente a las exportaciones y al crecimiento económico del país.
Además, Estados Unidos ha mostrado preocupación por la creciente influencia de China en América Latina. Chile, por su parte, busca mantener un equilibrio entre su histórica relación con EE.UU. y las nuevas oportunidades comerciales con el gigante asiático.
El gobierno chileno afirma estar consciente de los desafíos y trabaja en estrategias para diversificar mercados, fortalecer el comercio regional y aumentar el valor de sus exportaciones. La búsqueda de nuevos acuerdos con otros países y la atracción de inversiones en sectores tecnológicos son parte de los próximos pasos.
Mientras tanto, China reafirma su interés en seguir ampliando su presencia económica en Chile y en América Latina en general.
Autor: Jerome Rutland